GÉNESIS
EVA Y ADÁN Cuando el malsano manzano devoró la nueva Eva se espachurró la serpiente que Adán tenía entre las piernas: temeroso de Yavé y vestido de vergüenza mandó al infierno el Edén que disfrutaba en la Tierra... Pero para no olvidarlo quedó por siempre con Eva... ¡Ya veremos si el Amor algún día los regresa! Jesús María Bustelo Acevedo